Se sentía vacía. No le venía de nuevo, era un sentimiento que se encontraba acurrucado en el final de sus dedos, punzando a cada instante. El miedo le atormentaba la cabeza y los pies y viceversa. Los días pasaban, interminablemente lentos. Las habitaciones parecían más pequeñas de lo que realmente eran. Iba del salón a la cocina. De la cocina al salón. Encendía el televisor y se daba cuenta de que los concursos que sintonizaba ese aparato cada día eran más ridículos.
Los estantes estaban repletos de oquedad. No tenía nada que hacer.
Ojeó el diario. ¿Cuánto hacía que no sentía el tacto del papel entre sus manos? Eso le provocó un nudo en la garganta. Nauseas.
El mundo no cambiaba ahí a fuera. Política. Deportes. Famosos estúpidos. Sudokus. Series. Novedades estilísticas.
Y de repente lo vio.
Sus ojos quedaron embriagados por las palabras. El tiempo se había detenido. Las piernas no le respondían. O quizá sí. Quizá ya llevaba mucho tiempo dándose cuenta. Sin querer.
Tragó saliva y pudo comprobar, que efectivamente, se trataba de su propio nombre.
En la página gris sólo se veía su esquela y la de dos personas más. Leyó el poema siete veces. Quedó abstraída en la cruz cristiana y en los apellidos de sus padres, ahora desconocidos.
Amontonó el diario sobre el sofá y se levantó para hacerse un tazón de chocolate.
AMO como escribes :)
ResponderEliminarYa le traigo yo ese tazón de chocolate
ResponderEliminarMira la peli, creo que te gustará.
Un saludo!
Transmites mucho con tus palabras :O
ResponderEliminarEscribes increíblemente bien, haces sentir a los demás, nos sumerges.
Genial:)
Como muy bien dice LLanos... nos sumerges en tus palabras.
ResponderEliminarEnhorabuena por esa capacidad
Un abrazo!!!:D
Tus finales son increíbles, siempre consigues encontrar las palabras para esa frase que cierra la historia y siempre lo haces de forma inesperada. Impresionante!
ResponderEliminaroh dios mio, qué final! Muy...muy Poe! xD
ResponderEliminarme ha gustado :)
Todos los días llega la muerte.
ResponderEliminarbonito texto, y...que geniales son tus finales siempre...!:)
ResponderEliminarmuá
Nuevamente la palabra que te define, a travez de lo que leo es impresionante.
ResponderEliminarMe encanta como decis cosas desde otro punto, y transimitis exactamente lo que queres que nos llegue al leer lo que escribis.
Besos!
Asumir un estado, una condición, un dolor o un milagro...no es fácil, aunque un buen tazón de chocolate siempre reconforta.
ResponderEliminarBesos desde este invierno en Buenos Aires.
Quizá hay ciertos días que se vuelven rutinarios, que les falta una pizca de algo no?
ResponderEliminarEstoy absolutamente hipnotizado con la forma en que escribís!
ResponderEliminarTe felicito de verdad!
buen blog
Buffff... qué mal rollo! :P
ResponderEliminarT.T Esque los textos de esto me dan un mal rollo... >.<
Uf!
Una vez vi una pelicula muy parecida.
ResponderEliminarBesos :)
Me dejaste sin palabras
ResponderEliminarMe gusto mucho el final,una taza de chocolate para sobrellevar todo y volver a caminar.
Un beso
Suerte (:
voy a ir yo tb a por una taza de chocolate, o mejor, una tila, porque nose como lo consigues pero tus textos siempre son tan sorprendentes que dan un vuelco al corazón!
ResponderEliminarbesos!
El chocolate es mejor que el alcohol para olvidar.
ResponderEliminarvacío, un sentimiento del que puedo hablar.
ResponderEliminarHermoso texto ♥
Muy lindo leerte.
ResponderEliminarComo siempre.
Saludos
Increíble. No tengo más palabras.
ResponderEliminarSi ya no quedaba vida, que viviera la muerte.
ResponderEliminarConsigues dejarme sin palabras!
ResponderEliminarun besazo!
La por ens paralitza. Si en petites dosis és bona, a partir d'aquí pots ser molt i molt perjudicial. Sort que la chocolata és un bon substitut per a tot!
ResponderEliminarme gusto mucho como escribis!
ResponderEliminarA mí que me tarde en llegar...!!
ResponderEliminarUno de tus mejores textos. Impresionante.
ResponderEliminarBesazos :)
Hola, acabo de encontrar tu blog, que buen relato. En todas las estupideces que nos trae la vida siempre encontramos algo dulce o amargo que nos revitaliza y nos hace sentir vivos.
ResponderEliminarTe agrego y me pongo de seguidor para leer lo que dices, sigue asi =).
yo tambien me siento asi!
ResponderEliminarte sigo …
pasate por mi blog
Manejas la lírica a la perfección. Me encantó
ResponderEliminardebemos levantarnos en armas contra la monotonía...
ResponderEliminar¿Tan monótona es la "vida" de un fantasma que ni ser consciente de su realidad la cambia?
ResponderEliminarMuy buen relato, con un final magnífico.
Te felicito
Un abrazo
jojoojojojo! que paranoia!! Me ha gustado mucho!! Ole tu pluma!
ResponderEliminarCiertamente, la monotonía es la peor enfermedad que existe.
ResponderEliminarbuen final.
ResponderEliminarmuy
buen
final.
Yo no creo que una prostituta le tema al amor. El libro se llama "Detrás de las sonrisas", y lo publicó la Editorial La fragua del trovador, Zaragoza, mi queridisima España.
ResponderEliminarhttp://www.lafraguadeltrovador.com/
El libro te lo envian a tu casa si es que estas interesada:
fraguadeltrovador@telefonica.net
Porque cuando el recuerdo deja de doler, el olvido, empieza a aparecer...
ResponderEliminarEspero que ese tazón de chocolate estuviera bien dulce para despertarle todos sus sentidos.
ResponderEliminarSubbbblime
ResponderEliminarun pel identificat.
ResponderEliminarn'has de fer un de pluja i fred. T'estimo!
GU-A-U.
ResponderEliminarPunto.
brr, me viene genial ese tazón, tus textos me dejan helada :)
ResponderEliminarUn relato siniestro pero adictivo! Te seguiré, has sido un descubrimiento! :) un saludo
ResponderEliminarme encanta como escribes! el relato, increíble *:)
ResponderEliminarMuy bonito, cuanto transmites !
ResponderEliminarTe sigo! un beso =)
Visita mi blog =) http://espejismosdelalma-relatos.blogspot.com/